IPSA pierde los 6.500 puntos golpeado por Latam y Wall Street cierra en rojo una volátil jornada de rotación de carteras

Un turbulento episodio de rotación de portafolios experimentó Wall Street este jueves, el día después de la fuerte corrección liderada por el sector tecnológico, y considerando también un balanceado reporte de Producto Interno Bruto (PIB) en Estados Unidos.

A nivel local, el S&P IPSA bajó 1,12% hasta los 6.441,01 puntos, barriendo así con todos los avances registrados previamente este mes, y 23 de sus 29 acciones a la baja.

El selectivo resintió en particular la fuerte caída de Latam Airlines (-6,71%), que con un monto transado de más de $ 120 mil millones se acercó al precio equivalente a $ 11,37 por acción acordado en la colocación de sus ADR. Fue por lejos el papel con peor desempeño de la bolsa.

Recambios estratégicos

En Wall Street, todos los índices habían repuntado a mitad de sesión. Pero al final el Nasdaq Composite perdió 0,93%, luego de que el miércoles viera su peor jornada desde fines de 2022. Arrastrado por el influyente sector tecnológico, el S&P 500 cayó 0,51%. Por otro lado, el Dow Jones de 30 diversas megacap subió 0,2%, y el Russell 2000 de las small cap avanzó 1,26%.

"Nos encontramos en medio de una gran rotación impulsada por las tasas de interés, desde la tecnología a todo lo demás. Es cierto que ha sido doloroso, pero puede merecer la pena aguantar el temporal por lo que podría venir después. Es creer en este mercado alcista o correr el riesgo de quedarse atrás", dijo la estratega jefe de Ritholtz Wealth Management, Callie Cox, citada por Bloomberg.

A nivel macro, los inversionistas procesaron la primera lectura del PIB del segundo trimestre y otros nuevos datos de EEUU. En una mezcla de sorpresas al alza y a la baja, las tasas de mercado cayeron en los tramos más largos de endeudamiento, mientras las operaciones de swaps siguen contemplando que la Reserva Federal podría recortar la tasa hasta en 60 puntos base este año.

Kenny Fisher, analista de mercados de Oanda, destacó que "el crecimiento de la economía estadounidense fue mucho mayor de lo previsto en el segundo trimestre", y complementó que "hubo buenas noticias en cuanto a la inflación, ya que el índice de precios de los gastos de consumo personal, una medida clave para la Fed, se situó en 2,8% interanual".